
Su filmación en tiempo real, espacios reducidos y una cámara que te sigue y muestra hasta tu alma, es característico en él. La recomiendo...90 minutos acompañados -además- de una buena banda de nostálgicas cuerdas.
Actuaciones sólidas...como siempre una Blanca Lewin, musa del cine de Bize y un notable Santiago Cabrera. Actuaciones creíbles...
Qué vivan los vínculos!
PD. Obviamente duró en las salas del mall una semana y luego se fue a las de shopping, pues al parecer no atrajo gran público, a pesar de las buenas críticas. De echo éramos 2 en la sala. Yo apoyo el cine chileno en la medida que sea bueno y que dejen un poco de lado el sexo, el 73 y los garabatos excesivos.